Cuestión de prioridades

24 febrero 2022

Hoy es un día triste para el mundo y especialmente para Europa. Muchos años después, la palabra guerra vuelve a aparecer en las conversaciones. Cuando habíamos superado lo peor de una pandemia que nos ha tenido ocupados y preocupados durante dos años, un país (Rusia) invade a otro (Ucrania) en pleno siglo XXI.

Conscientes de que el deporte es de los activos universales más integradores existentes, debemos parar y reflexionar. Mañana, un equipo español, FC Barcelona, jugará en suelo ruso contra el Zenit de San Petersburgo ante la amenaza de perder un partido o a una sanción por no presentarse.

Hemos hablado en muchas ocasiones de la locura a la que han llevado el calendario de competiciones. No quedan huecos, la salud de los jugadores se pone permanentemente en riesgo, no ayuda a que los aficionados estén seguros de cuándo se juega un partido o de qué competición es y además, las competiciones de selecciones se ven claramente afectadas. Pero hoy no podemos mirar para otro lado porque hay una guerra. Sería caer en la tiranía de reconocer que por no haber fechas libres es mejor volar a un país que ha declarado la guerra a otro.

Exigimos a Euroliga que priorice el sentido común, los valores democráticos y la vida de las personas que forman parte del deporte antes que el simple hecho de jugar partidos por la presión de quedarnos sin fechas. Nunca ha tenido sentido este asfixiante calendario, pero hoy es una verdadera atrocidad.