18 mayo 2016
Cuatro batallas incruentas se han disputado este fin de semana en la capital alemana buscando el cetro baloncestístico europeo. El viernes, El CSKA cumplió con su condición de favorito ante el otro equipo ruso de la F4 y olvidó algunos fantasmas del pasado madrileño. De Colo se mostró infalible y casi él solo se merendó al Loko de un gran Delaney y de un Randolph con clase.
Foto: Baskonia.com
En la otra semifinal, el único representante español presente, tuvo en la punta de los dedos acceder a la gran final. Una salida fulgurante del Fenerbahce puso el marcador en 10-0 pero los vitorianos reaccionaron y dando un golpe en la mesa, mostraron que habían llegado a Berlín a por todas. Gran trabajo, como viene siendo habitual toda la temporada, de Bourousis y de Adams que no impidió el tiempo extra. El Laboral llegó exhausto a la prórroga después de un increíble esfuerzo y ahí, los turcos se llevaron el gato al agua con 9 puntos de Bogdanovic. Éste y Datome fueron los más destacados junto al buen trabajo de Vesely y Udoh.
El domingo, el Mercedes Benz Arena apareció teñido de amarillo. La afición turca no paró de animar en todo el fin de semana y se dejaba notar por todos los centros turísticos berlineses. Lo malo de permitir alcohol en forma de referscante cerveza alemana en el pabellón es que no todo el mundo la tolera igual ni mide la cantidad que puede ingerir. Afortunadamente no hubo altercados de relevancia pero podía haber ocurrido algo grave. Sorprendidos de que no haya una reglamentación uniforme en todos los recintos de Euroliga en cuanto a la prohibición del alcohol dentro de los mismos.
Fuente: http://www.fenerbahce.org
Los primeros minutos de la final fueron bastante igualados hasta llegar al segundo cuarto en el que el equipo ruso se desató y marcó tremendas diferencias con su rival. 20 puntos al descanso se antojaban renta más que suficiente para romper una “maldición” que perseguía los últimos años a los moscovitas. Pero claro, no contaban, o sí, con el brujo Obradovic. Poco a poco, gota a gota, los turcos fueron enjugando una diferencia superior a los 20 puntos aunque el tercer cuarto acabo con 16 de ventaja para Fenerbahce.
Ya se frotaban las manos en la fila a pie de pista los aficionados y potentados rusos que allí se encontraban. Uno de ellos protagonizó un desagradable incidente con Kalinic al empujarle cuando el jugador intentó recuperar un balón. No solo no fue expulsado de la cancha sino que se permitió el lujo de encararse con otros aficionados que le recriminaban su actitud. Lamentable por parte de Euroliga no tomar cartas en el asunto.
Teodosic. Fuente http://www.cskabasket.com
Y llegamos al último cuarto con la idea de que el equipo del sabio serbio iba a remontar. No se puede explicar pero la sensación estaba ahí. Itoudis, cada vez más nervioso, veía como su equipo se dejaba comer una renta que con otro enfrente habría sido definitiva. De forma inexorable, triple tras triple y con una defensa de libro, se consumó la remontada e incluso los amarillos se pusieron 2 arriba en la penúltima jugada. Un triple mal lanzado por De Colo dio la opción de rebote a Khryapa que milagrosamente para su equipo encestó para forzar la prórroga. Todo el mundo esperaba un final feliz para la gran remontada y la novena de Obradovic pero las pesadillas del CSKA personalizadas en Teodosic se disiparon y después de siete F4 el jugador serbio pudo al fin alzar la copa al cielo berlinés.
