Tres reflexiones de Rafa Jofresa

17 febrero 2019

Actitud de máxima competición

Es de agradecer que los dos equipos teóricamente inferiores en semifinales no bajaran los brazos en la segunda parte. Lo fácil era dejarse llevar y esperar pacientemente a que acabaran los 40 minutos. Pero no fue así. Jugar contra Barcelona y Real Madrid supone preparar el partido y aún así, tener muchas papeletas de ni siquiera competir.

Iberostar Tenerife y Divina Seguros Joventut dieron una lección. Cuando parecía que la distancia en el tercer cuarto apuntaba a la deriva de ir aumentándose minuto a minuto, fueron honestos con ellos mismos, con su afición y con el baloncesto en general: plantearon defensas nuevas, no bajaron su intensidad y creyeron hasta el final en sus opciones de competir. Una gran actitud contra la superioridad física aplastante que tenían enfrente.

Jugadores para tener en el radar

En una final, siempre hay jugadores que pueden marcar el partido. En el Barca Lassa la figura de Pau Ribas está siendo muy importante. Su papel ofensivo y defensivo es una referencia para su equipo. Cuando Pau está en pista, el equipo es más sólido y sube un punto de intensidad. En ataque, ha aumentado su protagonismo y en los dos partidos ha demostrado mucha capacidad para anotar. En la final, seguro que vuelve a ser un jugador vital para su equipo.

Thomas Heurtel es otro de los jugadores que será determinante. Marca el ritmo de su equipo. Ha sabido leer perfectamente cada defensa que tenía enfrente y para un partido como el de hoy, su talento es clave. Uno de esos jugadores con los que se disfruta viéndolos jugar. 

En el Real Madrid, Sergio Llull y Rudy Fernández no han estado a su nivel. Los problemas físicos que llevan unas semanas arrastrando lo están notando. Pero una final es una final y ambos tienen la suficiente experiencia en estos partidos para volver a ofrecer su mejor versión.

Por último, Gabriel Deck es un antídoto contra el físico que pone en cancha Pesic en cada partido. Es un portento físico y sus minutos en pista pueden ser un salto en la intensidad con el que el Barca debe lidiar. 

Arbitraje

Desde el máximo respeto a la labor que los árbitros desarrollan, hemos visto situaciones delicadas y difíciles de arbitrar. El Instant Replay no termina de resolver las dudas y además rompe el ritmo propio de un partido. Para la final, mi deseo es que todo sea más sencillo y menos polémico. Será bueno para el baloncesto.